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Prevención de lesiones: Al fortalecer los músculos estabilizadores y mejorar la coordinación y el equilibrio, el entrenamiento funcional puede ayudar a prevenir lesiones en la vida diaria y durante la práctica deportiva.
Mejora de la calidad de vida: Al mejorar la fuerza, la resistencia y la movilidad, el entrenamiento funcional puede ayudar a las personas a realizar sus actividades diarias con mayor facilidad y comodidad, mejorando así su calidad de vida en general.
El entrenamiento funcional es una excelente manera de mejorar la salud y el bienestar general, ya que se enfoca en desarrollar habilidades físicas que son útiles en la vida cotidiana. Tanto hombres como mujeres pueden beneficiarse enormemente de la inclusión de ejercicios funcionales en su rutina de ejercicios, ya sea que estén buscando mejorar su rendimiento deportivo, prevenir lesiones o simplemente mantenerse en forma y saludables.
