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Dieta Blanda: Seguir una dieta suave y fácil de digerir puede ayudar a aliviar los síntomas de la gastritis y permitir que el estómago se recupere. Evita los alimentos picantes, grasos, ácidos y fritos, y opta por alimentos suaves como arroz, puré de papas, pollo cocido, pescado al vapor, y frutas y verduras cocidas.
Evitar Factores Desencadenantes: Identifica y evita los factores desencadenantes que pueden empeorar los síntomas de la gastritis, como el consumo de alcohol, el tabaquismo, el estrés y el uso excesivo de antiinflamatorios no esteroides (AINE) como el ibuprofeno y el naproxeno.
Estilo de Vida Saludable: Mantener un estilo de vida saludable puede ayudar a prevenir y tratar la gastritis. Esto incluye comer una dieta equilibrada, hacer ejercicio regularmente, mantener un peso saludable, evitar el estrés excesivo y dormir lo suficiente cada noche.
En resumen, el tratamiento de la gastritis suele implicar una combinación de medicamentos, cambios en la dieta y estilo de vida, y evitación de factores desencadenantes. Si experimentas síntomas de gastritis de forma persistente o grave, es importante que consultes a un médico para recibir un diagnóstico y tratamiento adecuados.
